miércoles, 26 de marzo de 2014

On the road again.

Ya no me acordaba de lo que era estar de rodaje, de esas jornadas de once horas que parece que no se van a terminar nunca y del dolor de pies al llegar a casa después de tanto tiempo sin reposar el culo.
Y me gusta, la verdad es que me gusta mucho rodar, y tirar tomas y superar adversidades. Me gusta mucho la pértiga, y poner micrófonos ocultos y pedirle límite a los cámaras. Me gusta discutir cosas con los primeros de dirección y tirar cable y tener que ir corriendo a todos lados. Me gusta esa sensación de pequeña familia que se crea en todos los rodajes, la verdad.
Tiene su contrapunto, es cierto... Echo de menos a mi gente, a mis amigos, a mi sobrina y, sobre todo, a mi compañera. Echo de menos tenerla cerca, tener tiempo, compartir cosas, agradecerle todo lo que le debo y el apoyo indispensable que está siendo todo este tiempo... ¡Y los sábados! Después de casi cuatro años sin fines de semana libres, me ha costado solo tres meses volver a acostumbrarme a salir días normales.
Pero no renuncio. Me corre sonido por las venas. A pesar de que los párpados se me caen todo el rato entre palabra y palabra, me encanta esto. Lo echaba mucho de menos.
Me gusta ser de sonido. Me gusta estar de vuelta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario