Hace no demasiado tiempo que la autora de House of F-lies (ese blog maravilloso que hay enlazado a la derecha de las tonterías que escribe este humilde ratón) me planteó esa pregunta. Hoy me la ha vuelto a soltar un buen (muy buen) amigo periodista, un tipo que al fin y al cabo vive de lo que escribe.
Le he dado muchas -muchísimas- vueltas al asunto entre cervezas y patxaranes. Probablemente más de las que debería haberle dado. Y, de pronto, al llegar a casa, he puesto música al azar y la respuesta me ha venido sola de unos tal Barricada.
Le he dado muchas -muchísimas- vueltas al asunto entre cervezas y patxaranes. Probablemente más de las que debería haberle dado. Y, de pronto, al llegar a casa, he puesto música al azar y la respuesta me ha venido sola de unos tal Barricada.
"Mis manos están rotas,
se niegan a escribir.
Algo ronda en mi cabeza
se niegan a escribir.
Algo ronda en mi cabeza
que no me deja seguir".
Barricada. En la esquina del zorro.